El ejercicio es el
estrés físico aplicado al cuerpo humano. El sistema endocrino consta de
glándulas que liberan las sustancias químicas y las hormonas que controlan las
funciones fisiológicas del cuerpo.
¿Sabes qué hormonas
son responsables del crecimiento muscular en comparación con la descomposición
del tejido muscular? ¿Eres competente en el diseño de programas de ejercicio
seguros y efectivos que maximicen el crecimiento muscular y la utilización de
la grasa en función de la respuesta hormonal a los estímulos del entrenamiento?
A continuación encontrarás
hay una descripción general rápida del sistema endocrino:
Glándula pituitaria
Durante el ejercicio,
la glándula pituitaria libera la hormona del crecimiento humano (GH), que le
dice al cuerpo que aumente la producción de huesos, músculos y tejidos.
Glándula tiroides
Cuando comienzas a
hacer ejercicio, la glándula tiroides (ubicada en la base del cuello) envía
hormonas que regulan la temperatura del cuerpo, la frecuencia cardíaca y la
presión arterial. También regula el estado de alerta y la concentración que se
necesitan para trabajar a alta intensidad.
Glándula suprarrenal
Ubicadas en la parte
superior de los riñones, las glándulas suprarrenales son responsables de la
liberación de cortisol en el torrente sanguíneo. Los niveles de cortisol
controlan la presión arterial, la glucosa y actúa como agente antiinflamatorio.
Las glándulas suprarrenales también liberan aldosterona, una hormona que regula
los niveles de hidratación, la velocidad del corazón y la fuerza de las
contracciones. También convierte los carbohidratos almacenados en energía.
Páncreas
La insulina regula la
glucosa, o azúcar en la sangre, transportándola a los músculos y tejidos que
usan la glucosa como energía. El exceso de insulina en la sangre reduce la
sensibilidad a la insulina y puede causar diabetes, que también está
relacionada con el sobrepeso y la obesidad. El ejercicio mejora la sensibilidad
a la insulina y reduce la dependencia de las inyecciones de insulina.
Además, los efectos
del ejercicio sobre el sistema endocrino también son psicológicos. La
testosterona inducida por el ejercicio puede aumentar la libido y la confianza
de un individuo. Las endorfinas pueden ayudar a reducir la tensión y la ansiedad
por lo que se les conoce como las "hormonas de la felicidad".
La respuesta del
sistema endocrino ante el ejercicio físico esta medida, como ya lo mencionamos,
por la secreción de diferentes hormonas
que entran al torrente circulatorio para mantener la homeostasis .La síntesis
de estos mediadores y en consecuencia su acción dependerá de la duración del
ejercicio. Así se observa que en la:
1. Respuesta hormonal inmediata (los primeros
30 minutos de ejercicios): La
estimulación central a nivel del hipotálamo genera una estimulación simpática
adrenal con aumento de la producción de catecolaminas (Adrenalina y
noradrenalina) que determina una inhibición de la síntesis de insulina y
estimulación de la producción de renina con los efectos de estas hormonas en todas
las células del organismo.
2. Respuesta mediata (después de 30 y hasta 60
minutos de ejercicios): Se
secretan hormonas hipofisarias como GH, Adrenocorticotropina (ACTH),
Prolactina (PRL), Hormona antidiurética o Vasopresina (ADH) y Tirotropina (TSH)
3. Respuesta tardía (más de 60 minutos de
ejercicios): La estimulación
parasimpática induce la estimulación de la producción de ACTH y por
consecuencia la liberación de glucagón, somatostatina, secretina, polipéptido
intestinal vaso activo y polipéptido pancreático.
En relación con el
sistema osteomioarticular, el entrenamiento deportivo a largo plazo condiciona
la aparición de hipertrofia muscular. Se reconocen diferentes etapas en este
proceso.
1. Hipertrofia temporal aguda: Abultamiento del músculo que ocurre durante
una sola sesión de ejercicios. Se atribuye a la acumulación de líquido (edema)
en los espacios intersticiales e intracelulares del músculo. Es temporal y el
líquido regresa a la sangre al cabo de unas horas de finalizado el ejercicio.
2. Hipertrofia crónica: Aumento en el tamaño muscular que resulta del
entrenamiento con resistencias (adaptación/efecto a largo plazo). Resulta de la
hipertrofia de las fibras individuales debido a mayor número de miofibrillas,
más filamentos de actina y miosina, más tejido conectivo o cualquier combinación
entre las anteriores.
Son varios los
mecanismos que tratan de explicar la aparición de hipertrofia muscular.
Existe un factor
determinante y es el hecho de que existe un condicionamiento genético del número
de fibras musculares en el ser humano que se establece con el nacimiento o poco
después y permanece invariable el resto de la vida pero con el entrenamiento,
se observan adaptaciones que favorecen una ganancia en fortaleza muscular que
incluyen una mejor coordinación neuromuscular. Sin embargo, la compleja
interrelación entre diferentes hormonas tienen en este mecanismo su máxima
expresión .Se han relacionado de forma más constante los papeles de la GH,
dihidroepiandrosterona (DHEA), testosterona, y el sistema IGF-I (Factor de
crecimiento similar a la Insulina).
Estas interrelaciones
entre todas las hormonas demuestran la naturaleza altamente interdependiente
del sistema neuroendocrino en la influencia de la expresión de una
característica del rendimiento tal como lo es la fuerza y/o la potencia de los
músculos.