Monday, October 30, 2017

IMPORTANCIA DEL CALENTAMIENTO

Como entrenador con frecuencia te encontrarás con el escenario que tu cliente quiere entrenar rápido porque tiene un compromiso o porque debido al tráfico se le hizo tarde a la cita contigo y ahora ya no dispone de mucho tiempo o tu tienes a otro cliente programado después de él o ella, y la solución a esta “falta de tiempo” es saltarse el calentamiento y dirigirse directamente al programa de entrenamiento. A continuación encontrarás las razones de por qué, como entrenador personal no debes dejar que esto suceda.

¿Es el calentamiento realmente necesario?
El calentamiento sirve para dos propósitos principales: mejorar el rendimiento y prevenir lesiones. En consecuencia, un calentamiento es tanto físico como mental.

Mejora el rendimiento
La mayoría de los vasos sanguíneos pequeños (capilares) dentro de los músculos están cerrados. Después de 10 a 12 minutos de una actividad física que eleve nuestro ritmo cardiaco lo suficiente como para comenzar a sudar, el flujo de sangre a los músculos esqueléticos aumenta alrededor de un 70 a 75 por ciento y los capilares se abren.

Junto con este incremento en el flujo sanguíneo, aumenta la temperatura muscular. Esto es bueno porque la hemoglobina en la sangre libera oxígeno más fácilmente a una temperatura más alta. Más sangre viajando hacia los músculos, junto con más oxígeno disponible para los músculos que trabajan, significa un mejor rendimiento.

Un aumento en la temperatura también contribuye a una contracción y relajación muscular más rápida. La transmisión nerviosa y el metabolismo muscular aumentan, por lo que los músculos funcionan de manera más eficiente.

Prevención de lesiones
Es difícil encontrar estudios científicos que relacionen el calentamiento con la prevención de lesiones debido a que pocos atletas desean someterse a una prueba de esfuerzo muscular para ver qué se necesita para lesionar un músculo.

Sin embargo, existen estudios en animales que determinaron que lesionar un músculo que ha pasado por un proceso de calentamiento requiere más fuerza y más longitud muscular que un músculo sin calentamiento. Este estudio está de acuerdo con los datos anecdóticos de que los desgarros musculares agudos ocurren más a menudo cuando los músculos están fríos o no se calientan.

Se han realizado estudios en humanos sobre el ejercicio repentino de alta intensidad y los efectos sobre el corazón. Un estudio en particular tuvo a 44 hombres (sin síntomas evidentes de enfermedad coronaria) en una cinta de correr de alta intensidad durante 10 a 15 segundos sin ningún calentamiento. Los datos del electrocardiograma (ECG) mostraron que el 70 por ciento de los sujetos mostraban cambios anormales en el ECG que se atribuían al bajo suministro de sangre al músculo cardíaco. Los cambios anormales no estaban relacionados con la edad o el nivel de condición física.

Para examinar el beneficio de un calentamiento, 22 de los hombres con resultados anormales realizaron un trote a una intensidad moderada durante dos minutos antes de subirse a la cinta para otra prueba de carrera de alta intensidad. Con ese pequeño calentamiento de dos minutos, 10 de los hombres ahora mostraron resultados de ECG normales y 10 mostraron resultados mejorados. Sólo dos de los sujetos aún mostraban anormalidades significativas.

¿Cuánto se debe calentar?
No hay pruebas contundentes de la cantidad de calentamiento que se necesita antes de un entrenamiento o una carrera. La mayoría de las recomendaciones están en el rango de 10 a 20 minutos, aunque algunos atletas han descubierto que necesitan más tiempo de calentamiento.

Los atletas con altos niveles de condición física generalmente necesitan períodos de calentamiento más largos antes de realizar entrenamientos de alta intensidad o carreras cortas. Los atletas con niveles más bajos de condición física generalmente usan un tiempo de calentamiento más corto. Sin embargo, los atletas con bajos niveles de aptitud también tienden a producir velocidades más bajas durante los entrenamientos y las carreras.


Para las personas que se ejercitan en gimnasios se recomienda iniciar con 6-10 minutos en un equipo cardiovascular a una intensidad lo suficientemente alta para elevar el ritmo cardiaco de manera que permita cierta sudoración, luego es conveniente un estiramiento leve de los músculos a trabajar y por último realizar de 2 a 3 series de calentamiento con un peso o resistencia leve del primer ejercicio de cada grupo muscular que se vaya a ejercitar (calentamiento específico), y después se recomienda proceder a incrementar la resistencia o peso gradualmente en cada serie (esto dependerá del objetivo del programa que se siga).

Tuesday, October 24, 2017

BENEFICIOS DE LOS LUNGES

Un ejercicio que es muy efectivo para formar y fortalecer la parte inferior del cuerpo mientras también lo prepara funcionalmente para las actividades de la vida cotidiana, como caminar y subir escaleras, son los famosos “lunges”. Este versátil ejercicio se puede realizar de diferentes maneras, pero en este articulo nos concentraremos en analizar solamente dos, el lunge convencional hacia delante y el lunge reverso. A continuación analizaremos las ventajas y desventajas de ambas versiones para que puedas determinar qué opción puede adaptarse mejor a las necesidades de acondicionamiento físico de tus clientes.

Lunge convencional
Este ejercicio ha sido durante mucho tiempo un componente básico en los entrenamientos para las piernas de muchos asiduos al gimnasio, y por muy buenas razones. Un estudio de investigación del American Council on Exercise encontró que el lunge hacia adelante es uno de los ejercicios más efectivos para provocar un alto nivel de actividad muscular en el glúteo mayor, el glúteo medio y los isquiotibiales, significativamente más que otros ejercicios comunes para la parte inferior del cuerpo como la sentadilla (squat).

Además de ser altamente efectivo, el lunge hacia adelante también es bastante funcional, ya que en esta fase del ejercicio imita nuestro patrón de caminar. Dado que nuestros cerebros están acostumbrados a poner un pie delante del otro, uno de los beneficios que ofrece el lunge convencional es reforzar el patrón de marcha de una manera que desafía el equilibrio y los músculos de las extremidades inferiores. En la fase de retorno a la posición inicial activa mayormente los músculos isquiotibiales para poder realizar este movimiento.

Sin embargo, esta versión de este ejercicio puede tener implicaciones en la articulación de la rodilla, ya que puede considerarse un movimiento de aceleración, pues el cuerpo se mueve hacia adelante y hacia atrás, lo que resulta en un mayor desafío. Después que el cuerpo es impulsado hacia adelante a través del espacio, para regresar desde la parte inferior del movimiento debe usar la fuerza suficiente para devolver el cuerpo con éxito a la posición inicial, lo que representa una mayor dificultad que puede hacer que este ejercicio  sea un problema para las personas con cualquier patología de la rodilla, ya que para realizarlo correctamente, se requiere una mayor cantidad de fuerza y/o un rango de movimiento mayor.

Es primordial dominar la técnica adecuada de este ejercicio con el peso corporal antes de agregarle una carga extra. Realizar este ejercicio con buena forma puede proporcionar resultados óptimos y minimizar el riesgo de lesiones. Durante el lunge convencional, es esencial que se baje recto con la pelvis flexionada hacia delante y la espalda recta. Se debe avanzar con el pie lo suficientemente hacia adelante para que la parte media de la rodilla delantera esté directamente arriba del tobillo durante el movimiento de descenso. Luego se debe bajar las caderas hasta que las rodillas estén dobladas a 90 grados y se debe colocar la presión del peso en la parte posterior del pie delantero durante el ejercicio, sobretodo al momento de impulsar el cuerpo hacia atrás.

Lunge reverso
Esta versión del lunge ofrece al cuerpo la oportunidad de avanzar en una dirección en la que la mayoría de nosotros no pasamos mucho tiempo (hacia atrás), ofreciendo un nuevo desafío. Sin embargo, en esta versión de este ejercicio es menos difícil equilibrar el cuerpo porque el centro de gravedad siempre permanece entre los dos pies, contrario al lunge convencional en donde el centro de gravedad se mueve hacia adelante del cuerpo durante el movimiento de avance hacia el frente, por lo que el lunge reverso puede ser una opción para las personas que tienen problemas con el equilibrio.

Parte de la facilidad en la realización de esta versión en comparación con el lunge convencional es que se está moviendo el cuerpo hacia arriba y hacia abajo y no a través del espacio, por lo que puede considerarse un movimiento de desaceleración. Su naturaleza estrictamente de movimiento vertical requiere menos fuerza que un lunge hacia adelante, esto permite entrenar los músculos de la pierna de apoyo con menos tensión en las articulaciones, convirtiendo a esta variación en una opción adecuada tanto para las personas con problemas de rodilla como para quienes carecen de movilidad de cadera.

Conclusión

Ya sea que se intente moldear la parte inferior del cuerpo, aumentar el tejido muscular, desarrollar la fuerza del tronco (core) o flexibilizar las caderas, el lunge puede ayudar a lograr el objetivo. Este ejercicio funcional, multi-articular se puede modificar para cumplir con el nivel de condición física y características de una persona. Ambos tipos de lunge, cuando se realizan correctamente, requieren que una cadera se flexione y la otra se extienda, a la vez que también se controle la pelvis a través de una activación adecuada del tronco, ya que los músculos de la cadera, el abdomen y la parte inferior de la espalda deben trabajar de forma sincronizada para controlar la inclinación de la pelvis.