Friday, March 13, 2020

GUIA PARA PREVENIR EL CORONAVIRUS EN GIMNASIOS

El nuevo coronavirus, SARS-CoV-2, que causa la enfermedad infecciosa por coronavirus COVID-19, como lo nombró la Organización Mundial de la Salud, está alterando el estilo de vida de muchas personas y está cobrando un costo humano y económico visible. Los profesionales del acondicionamiento físico en todo el mundo pueden continuar promoviendo la salud y minimizar la interrupción de sus labores con precauciones de sentido común y atención a las recomendaciones de las instituciones encargadas de la salud pública. Este artículo contiene información sobre lo que sabemos actualmente sobre el virus, medidas preventivas sugeridas.

Lo que deberías saber
COVID-19 proviene de la familia de coronavirus, que incluye el resfriado común. COVID-19 parece ser un coronavirus animal, no visto antes en humanos, que apareció por primera vez en la ciudad de Wuhan, China, y se está propagando a nivel mundial a través de la transmisión de persona a persona. Los profesionales del fitness pueden recordarles a los demás que la mejor defensa contra los virus, además de medidas preventivas específicas, es mantener un estilo de vida saludable en general que incluya actividad física regular.

La buena noticia, hasta ahora, es que el sudor no puede transmitir el virus, y existe un menor riesgo de contraer coronavirus en un gimnasio o estudio de entrenamiento personalizado que en un servicio religioso, según David Thomas, MD, MPH, profesor de medicina y director de la División de Enfermedades Infecciosas de la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins (The New York Times, 8 de marzo de 2020).

Medidas preventivas
Como no existe una vacuna para proteger contra COVID-19, los expertos en salud pública recomiendan las siguientes medidas preventivas personales:

  • Lavarse las manos con frecuencia. Lavarse las manos minuciosamente y con frecuencia, ya sea con agua y jabón durante 20 segundos o con una solución a base de alcohol al 60%, para eliminar cualquier virus en sus manos. Los secadores de manos por sí solos no son efectivos para matar COVID-19.
  • Evitar tocarse la cara. Evitar tocarse los ojos, la nariz o la boca con las manos sin lavar, ya que cualquier virus en las manos después de haber estado en contacto con una superficie puede ingresar al cuerpo a través de los ojos, la nariz o la boca, según la información actual.
  • Mantener una distancia prudente. Se recomienda mantener una distancia de al menos 3 pies entre personas aparentemente sanas y mantenerse a 6 pies de distancia si una persona tose o estornuda (OMS 2020).
  • Limitar el contacto. Evitar el contacto cercano con personas que están enfermas. Si una persona está enferma con síntomas respiratorios como fiebre, secreción nasal y/o tos, debe quedarse en casa y buscar atención médica si su condición empeora con fiebre alta y/o dificultad para respirar.
  • Se recomienda toser tapándose la boca con el brazo flexionado o en un pañuelo de papel. Desechar los pañuelos de papel inmediatamente en un recipiente tapado y lavarse las manos con agua tibia y jabón. Lavar la ropa en la que se tose. Se desconoce cuánto tiempo puede vivir el virus en superficies duras y blandas. Según la OMS, los coronavirus pueden sobrevivir en las superficies durante algunas horas o hasta varios días. La mejor manera de asegurarse de que las superficies que toquen no contengan gérmenes es limpiarlas con un desinfectante.
  • Máscara facial. Si se pregunta si debe usar una máscara facial, los expertos en salud pública informan que actualmente no se recomienda para el público en general en los Estados Unidos, solamente si tiene síntomas de resfriado, tos o gripe.


Con base en las mejores prácticas de salud pública, los gimnasios deberían incluir las siguientes recomendaciones:

  • Alentar activamente al personal y/o miembros enfermos a quedarse en casa. Hacer anuncios y colgar carteles sobre quedarse en casa cuando está enfermo y sobre seguir la etiqueta de tos y estornudos.
  • Indicar al personal y a los miembros que se laven las manos con frecuencia. Proporcionar desinfectante de manos con un mínimo de 60% de alcohol en la entrada y en toda la instalación. Fomentar su uso frecuente.
  • Asesorar al personal y a los miembros sobre el uso y la eliminación de pañuelos desechables. Proporcionar pañuelos desechables y recipientes de eliminación sin contacto en lugares fácilmente visibles y accesibles.
  • Proporcionar toallitas de limpieza desinfectantes desechables cerca de todas las superficies de uso común. Incluya instrucciones para limpiar las superficies antes y después del uso con un desinfectante que contenga al menos un 70% de alcohol. Limpiar las superficies puede reducir los gérmenes, pero solo el desinfectante que contiene al menos un 70% de alcohol mata los gérmenes. Evitar el contacto práctico con los clientes. Evitar los apretones de manos u otros saludos de contacto cercano.
  • Usar agua caliente para lavar las toallas; desinfectar las cestas y/o usar bolsas de ropa desechables. Usar guantes cuando se manipule ropa sucia y desecharlos inmediatamente después. Lavarse las manos inmediatamente después de quitarse los guantes.
  • Sugerir a las personas que utilicen sus propias toallas.
  • Usar guantes al manipular equipos de entrenamiento con pesas. Recomendar a los clientes que usen guantes desechables cuando utilicen equipos de entrenamiento con pesas.
  • Realizar una limpieza de rutina de las superficies que se tocan con frecuencia. Limpiar todo lo que el personal, los entrenadores y los miembros suelen tocar, por ejemplo, pomos de las puertas, pasamanos, interruptores de luz, manijas, bebederos, inodoros, grifos, lavamanos, duchas, armarios, bancos, equipos de gimnasia, mesas, computadoras, teclados, auriculares, micrófonos, controles remotos de televisión y música, y todos los escritorios.
  • Informar a los clientes sobre las medidas de higiene. Para tranquilizar a los clientes, enviar un correo electrónico y/o publicar un aviso que enumere las prácticas del personal y las políticas para desinfectar las instalaciones. 
  • Mantenerse actualizado. Parte del desafío actual planteado por COVID-19 es que aún se desconoce mucho.


Cada día, científicos y profesionales médicos están aprendiendo más, por lo que se debe mantener informado de los riesgos reales siguiendo las actualizaciones de estado que ofrecen los CDC, la OMS y otros departamentos de salud. Si el virus aún no está en su comunidad, el riesgo de transmisión es bajo. Si ha llegado a su localidad, tomar medidas específicas puede limitar considerablemente el riesgo.